Monte Artxanda, Bilbao
(Lugar del que hablo en este post)
Quiero
compartir mi percepción del día 11/11/11…
estaba cerca de la naturaleza buscando un lugar cómodo donde meditar y a la hora prevista había mucho viento,
realmente impresionante, los árboles de otoño movían sus ramas, con sus
preciosas hojas amarillas y naranjas... la fuerte brisa parecía tocar mi piel y
la sensación que percibí era de que ese potente viento a su paso arrancaba
de mi todo aquello que ya no servía, y que los árboles con su movimiento
expresaban que me movilizara flexiblemente, que soltara la rigidez tanto mental como física… las aves cantaban alegres y
despiertas… aunque existiera una fuerte brisa estaban felices a lo suyo, sin
protestar agradeciendo ese momento…
En
consecuencia el mensaje que recibí de la sabia naturaleza, era que me
movilizara ante la vida, soltando todo aquello que me fuera inútil y sin
protestar…aceptando con alegría.
Ese
día era un día de meditación en la mayoría del planeta, es hermoso imaginarse a
un gran grupo de personas en diferentes
partes del planeta relajadas y llenas de
buenos deseos, uniendo sus pensamientos con un hilo de amor… ya eso es
ganancia, ya por eso vale la pena un día así… mi invitación es que no hace
falta un día donde entren nuevas energías, desde mi punto de vista esas
energías las proporcionamos nosotros con nuestros pensamientos amorosos.
Cada día podemos abrir los
portales de nuestro corazón y meditar unidos, permitiendo
que el torrente de amor que reside
en nuestro corazón, se derrame por toda
la tierra y toque cada de los seres del planeta… bienvenidos a los portales eternos de apertura del Ser.
Con
amor…Luz
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