26 de noviembre de 2011

Mujer y Dragón del Apocalipsis (I)


El simbolismo del apocalipsis tiene un significado profundo para nuestra consciencia y es importante el abrir nuestra mente para que éste deposite su infinito manantial de sabiduría e impregne nuestra esencia para que emerja ese nuevo hombre-mujer (Ser integrado: energía masculina y femenina), que tiene el don de restablecer un orden sagrado de amor y fraternidad universal. A continuación describo frase por frase el apocalipsis 12:1-6 donde se habla de la mujer y el dragón, puede que no estés  de acuerdo en mi interpretación y lo respeto... simplemente es otro punto de vista y que lleva la intencionalidad de que te adentres en tan interesante simbología por ti mismo y “descubras” y te sean “reveladas” tus propias verdades.


(Ap. 12:1) “Apareció en el cielo una gran señal: una mujer vestida del sol, con la luna debajo de sus pies, y sobre su cabeza una corona de doce estrellas”
Esta mujer es la nueva consciencia que aparece integrando la luz de  sabiduría que le otorga el total dominio de sus instintos, porque ha ido a su "noche oscura del alma" y  la luna es  “la nave de luz en el mar de la noche”.  Esta mujer está vestida de luz porque  ha resurgido con el don de la intuición. Es bien conocido que todas las diosas lunares son las tejedoras del destino. En consecuencia esta mujer esta vestida de sol y está sobre la luna... porque es la nueva humanidad que se reconoce como la dueña de su destino y lo va hilando con su poder intuitivo de la feminidad, "es el útero" para que se forme el nuevo hombre. La corona de doce estrellas es esta nueva humanidad  guiada por  el conocimiento de las ruedas del destino, representada por los doce signos del zodiaco o como es más conocido en el cristianismo por los doce apóstoles.

(Ap. 12:2) “Y estando encinta, clamaba con dolores de parto, en la angustia del alumbramiento”
Esta humanidad es consciente, porque tiene integrado la luz de la luna y el sol (masculino-femenino), en unión perfecta. La mujer ya está preparada, por lo tanto tiene premura en traer al mundo el “nuevo hombre” y depende de nosotros el que nazca en nuestros corazones. A pesar de su profundo dolor quiere dar a luz la sabiduría de este nuevo hombre.

(Ap. 12:3) “También apareció otra señal en el cielo: he aquí un gran dragón escarlata, que tenía siete cabezas y diez cuernos, y en sus cabezas siete diademas”
El dragón es símbolo de la integración de todos los elementos en un sólo ser luz-oscuridad, es decir la unidad de las fuerzas opuestas, representado por el poder de Saturno (Cronos-Tiempo) el gran transformador.  Las siete cabezas son las 7 emanaciones o esferas del árbol de la vida que se originan a partir de la triada que dirige y guía el árbol de la vida. Por otra parte el simbolismo del cuerno, es representación de la luz que produce el entendimiento y que es capaz de guiar por la espiral de la vida.  En consecuencia el dragón es el poder del tiempo que se acerca con la fuerza  purificadora del fuego y que emana   la luz del entendimiento fundamentada en  7 principios básicos: La misericordia  que otorga la grandeza del espíritu, La justicia porque todo ocurre por la ley de causa y efecto y esto provee al individuo de una Fuerza que lo impulsa a construir
La belleza interior que se refleja en el exterior... en consecuencia obtiene  La victoria de la vida sobre la muerte sabe que nada de lo que cree puede ser destruido y se hace consciente de  La eternidad del Ser... estableciendo de esta manera El fundamento, o piedra angular  para el establecimiento del Reino, donde empieza a construir las nuevas formas de un mundo más evolucionado.
Por lo tanto el dragón no es más que el tiempo con sus polaridades apareciendo con el fuego purificador de los 7 principios de la eternidad y que son emanados desde las diez manifestaciones de la luz de  Dios.

Continuará...

Con amor...Luz

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy interesante Luz.

J.

Luz Rodríguez dijo...

Gracias J., es que toda lo que es simbólico es realmente fascinante, sobre todo porque llega a un nivel de consciencia profundo y pasa a través del tiempo.

Con amor...Luz