Relaciones de Transición

Cuando estamos en transición luchamos contra las creencias, los esquemas y las expectativas del pasado, así como contra un futuro lleno de niebla e incierto… probablemente vamos de un extremo a otro, desde lo moralista y la adecuación hasta la temeridad y la aventura, y se suele hacer elecciones imprudentes e impulsivas con resultados dolorosos. Al mismo tiempo, esta fase de transición puede ser un período de asumir riesgos, de diversión y experimentación, y puede resultar también una época rica, de profunda reflexión interna y autodescubrimiento.

Las relaciones que comenzamos durante un período así raras veces resultan duraderas…cuando estamos en pleno cambio atraemos a personas que reflejan la sensación de estar incompletos, y entonces las relaciones tienden a desarrollarse de tres formas características que yo les llamo “de fuego tormentoso”, de “remembranzas” o de “extremo contrario”.

Las relaciones de “fuego tormentoso” son intensas y llenas de pasión, pero tienen corta vida; en ellas accedemos a emociones anteriormente negadas y las liberamos…las relaciones de “remembranzas” es un duplicado de lo que acabamos de dejar, es decir, el mismo “cuento” de nuevo sólo que con nuevos nombre y nuevos lugares, una vez reconozcamos el parecido … seguro queremos salir corriendo o tomar la determinación de hacer lo posible para que esta vez sea distinta. De cualquier forma, el dilema fundamental es que no apreciamos la similitud de ambas. Por último, en una relación “extremo contrario” atraemos justo lo contrario de la última relación que hemos mantenido en un total balanceo al otro lado del péndulo, lo que significa que aún se tiene pendiente el mismo problema.

Cualquiera que sea la experiencia en la que nos veamos implicados, estaremos desmitificando nuestras ilusiones y aprendiendo sobre el amor verdadero; y nuestros compañeros pueden convertirse en maestros en tanto que nos obligan a vernos a nosotros mismos.

Al final lo importante es que trabajemos en consolidarnos y fortalecernos interiormente…revisemos en profunda reflexión nuestras relaciones anteriores…a mi particularmente me ayudo el dejar de emplear el tiempo en relaciones y emplearlo en mi misma, en mirar hacia mi interior…explorando esquemas de mi feminidad negativa e irlas aceptando y viendo como se desvanece el poder que tenían en mí… poco a poco voy llegando a mis profundidades y cada vez más me voy preparando para subir…mientras voy dedicando mi tiempo a amarme y apoyarme… hoy día ya no tengo necesidad de relaciones excitantes y estimulantes, porque voy transformando mi habito de llegar a límites poco saludables y poco a poco voy llevando esa misma energía al límite creativo, donde la excitación que puedo necesitar en un momento dado la voy llenado de manera saludable… y así empiezo a dominar algunas tendencias y me voy expandiendo…y voy caminando con paso firme y seguro por el sendero del amor real.

Con amor…Luz.